Que paséis un Feliz Hallowen y disfrutad del artículo i1rm
El apartado más destacable era su increíble ambientación gracias a unos gráficos realmente trabajados, ya que podíamos encontrarnos muchísimos enemigos por pantalla sin sufrir problemas de ralentización con diversos efectos como la sangre, las vísceras y otras escenas demasiado graficas como para contarlas por palabras. En cuanto a la jugabilidad, el apartado jugable era tan simple como efectivo, manejábamos al personaje en escenarios repletos de monstruos y charcos de sangre, controlándole únicamente de izquierda a derecha, el botón de salto y el botón de ataque, luego hacía falta nuestra habilidad con los controles, porque cada nivel que pasaba era un mayor desafío para el jugador. Splatterhouse sufrió modificaciones diversas en la versión de Turbografx, donde la máscara de Hockey parecida a la del asesino de Viernes 13 fue cambiada por una de color roja, más que nada para evitar los problemas con la saga de Jason Voorhees, también se cambiaron algunos sonidos y escenas no apto para estómagos débiles. SplatterHouse también tuvo una versión más infantililla que solo salió en Japón y también fue desarrollado por Namco, se llamaba "Wanpaku Graffiti" y aunque manejábamos a Rick y su conocida mascara, esta versión Nintendera ofrecía guiños y otras escenas aptas para todos los públicos sin utilizar la violencia que aplicaron en el resto de entregas. Un imprescindible sin lugar a dudas. [youtube]j9wx6K12lq0[/youtube]
Posiblemente sea uno de los juegos retro más violentos, asquerosos y polémicos de la historia, ya no solo por el hecho de que veremos brazos arrancados a cuajo, gatos a los que desmenuzar y humanos a los que demacrar, Exidy había creado un juego completamente malvado donde nosotros éramos los asesinos y los maniáticos que tenían un solo objetivo: No dejar nada vivo.